Como una de las películas juveniles de ciencia ficción más peculiares que se ha podido apreciar en los cines el año pasado tenemos a Scott Pilgrim vs The World, basada en la serie de seis comics del artista independiente Brian O’Malley, quien crea un mundo que combina la fantasía geek con la realidad en Canadá. La película estuvo bajo la dirección de Edgar Wright, quien es reconocido en su natal Inglaterra como uno de los mayores gestores del humor moderno y lleno de detalles que hacen guiño a la cultura popular, logrando de la mezcla aquí vista un trabajo de lo más resaltante.
La película nos trae a Scott Pilgrim, un joven que para poder lograr el amor de la misteriosa Ramona Flowers deberá derrotar a quienes fueron sus siete ex novios malignos, quienes se aparecerán de manera sucesiva para querer acabar con Scott y presentándose con sus propias personalidades especiales. La cinta y el comic hacen referencia temas propios de la música independiente y los videojuegos, siendo de arranque los siete ex-novios malignos una referencia directa a los siete hijos de Bowser en Super Mario World, quienes eran jefes de cada mundo. Efectos que serán del agrado de cualquier videojugador o ajeno a estos temas así como constante y divertida acción es lo que toca ver en el mundo de Scott Pilgrim, quien estará rodeado de un buen número de singulares amigos y demás personajes.